La ciencia de datos ante la pandemia

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Hace unos días, el subsecretario de promoción y prevención de la salud, Hugo López-Gatell, durante su conferencia de prensa vespertina habló sobre el uso de la ciencia de datos para analizar el fenómeno del coronavirus y su impacto en México.

Ante esto, la Mtra. Lucía Beltrán Rocha, Directora Académica de CETYS Universidad Campus Internacional Ensenada, y experta en ciencia de datos, explicó que en esta época en donde la información se maneja en grandes volúmenes, es relevante contar con herramientas que nos permitan aprender del comportamiento de los datos para construir modelos que nos apoyen a identificar un fenómeno, en este caso el COVID-19.

Destacó que gracias al aprendizaje automático y ciencia de datos se puede hacer análisis y extraer conocimiento de estos datos, ello con la finalidad de establecer supuestos y algunos hechos, por ejemplo, determinar que el coronavirus tiene una afección mayor en personas de edad avanzada; que afecta a quienes tienen otras comorbilidades que comprometen el sistema inmunológico, como la hipertensión, la obesidad, la diabetes, entre otras; y también ha permitido caracterizar la sintomatología de la enfermedad, como la tos, la fiebre y el dolor de garganta, entre otros.

“Herramientas del análisis de datos, como la minería de datos, el aprendizaje automático y el análisis estadístico, permiten descubrir patrones a partir de la información histórica que se va registrando día a día, apoyando en la construcción de modelos que representen el comportamiento de las variables que caracterizan a esta enfermedad”.

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Mtra. Lucía Beltrán.

Detalló que algunas de esas variables son las características de los individuos que son contagiados, los que transitan por la enfermedad sin complicaciones y aquellos que se complican hasta trascender en una defunción,  la actividad de estos, las condiciones de salud previas, entre muchas otras variables que definen el historial de cada paciente; también se puede analizar datos geográficos, ambientales, ocupacionales, entre muchos más, y con ello se puede identificar un patrón, una tendencia y hasta predecir con un cierto grado de error lo que ocurrirá en el tiempo.

De esto se derivan estrategias como la sana distancia y lo que representa el aislamiento social que han minimizado la propagación del virus, y con ello ha permitido que el sistema de salud actúe de forma pertinente ante el cúmulo de demanda de contagiados.

Sin embargo, sostiene la experta, los contagios no han cesado y los datos del fenómeno se siguen acumulando, de tal suerte que con el tiempo tendremos mucha información que, a través de la ciencia de datos, nos permitirá predecir si este fenómeno volverá a ocurrir, la época del año, la caracterización de los individuos portadores y de los inmunes, los que se encuentran en mayor riesgo, los recursos con los que debe contar la humanidad para hacer frente, por mencionar algunos. “Definitivamente, el gran reto será cómo aterrizamos todo esto en acciones”, concluyó.

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