Hasta el momento tenemos que le han llovido críticas al magnate de las telecomunicaciones y al hombre más rico del mundo a costillas de millones de mexicanos. Sin embargo, poco nos preguntamos quién lo llevó al lugar en donde se encuentra. Parece ser que fue y ha sido, un Estado que ve con ojos de venta todo lo que le rodea. Un modelo neoliberal que sólo contempla la avaricia y la riqueza. Y es que las formas de pensamiento que han dominado los últimos 25 años han sido el libre mercado y las ideas de corte monetarista. Ahora, nos quejamos de ese comportamiento cuando nosotros mismos lo hemos incubado e impulsado. Lo hemos disculpado y bendecido en todos los idiomas y las formas. Por el libre mercado vendimos todo. Y si el reproche es para Slim, de parte de todos y atinadamente de Dresser, por favor hagamos uno para los bancos (oligopolio) y para las dos televisoras (duopolio), para un PEMEX que ha sido carcomido en las entrañas por su sindicato y sus funcionarios, y sobre todo, cambiemos un modelo económico que ve la vida en forma equivocada.Que desgracia que no tenemos nada de lo prometido y ahora para vender lo poco que nos queda damos como pretexto la falta de tecnología. No, no la tenemos y por ende necesitamos vender PEMEX al mejor postor. No, no la tenemos y ni la vamos a tener si seguimos bajo las actuales circunstancias de simulación. Se nos dice que hay que hacer reformas y más reformas que nos lleven al ansiado crecimiento. Crecimiento que no llega después de vender casi todo y aún así tenemos 60 millones de pobres. ¡Esa es la realidad!. Ver artículo completo aquí
Platicando en la Mesa con Slim y Dresser

