Intercambio, lo Entiendes Sólo Sí lo Vives

Lo que me motivó a realizar esta experiencia fuera del país fue la necesidad de conocer el mundo que me rodea. Yo escogí Francia debido a que como ya contaba con el conocimiento del idioma de aquel país, decidí ir a practicarlo para mejorarlo y obtener así como resultado un tercer idioma.Realmente al principio fue un poco difícil integrarme a esa nueva vida, debido a que me encontraba por primera vez sólo y tuve que acoplarme. Para mi suerte al segundo día de llegar ya contaba con las que serían mis amistades todo el semestre. El ritmo de vida, la comida, las situaciones y sobre todo la cultura son muy diferentes, aún más si vives en una residencia universitaria y te encuentras con personas de todo el mundo. Puedo decir que París me lo sé de memoria. Lo recorrí todo lo que pude. Viví su cultura y viajé a los países vecinos. Me divertí mucho todo el tiempo riendo y conociendo. Entre las muchas de las cosas que aprendí, una muy importante fue el valor de la tolerancia, somos tan parecidos y tan diferentes a la vez, que a veces resulta complicado decidir cuál camino tomar.Sin duda es una experiencia que invito a todos a realizar, ya que por más que la describa, nunca podrán entenderla si no la viven.*Extracto de testimonio.