Cuando el consumidor opta por la compra de artículos originales, se convierte en un aliado del ecosistema comercial, explica Experta CETYS
Cada 11 de octubre se conmemora en México el Día Nacional de Combate al Contrabando y Delitos en Materia de Derechos de Autor. De acuerdo con la Mtra. Nathalie Canizales Reyes, coordinadora de la Maestría en Derecho de CETYS Universidad Campus Mexicali, el contrabando y la piratería continúan siendo una asignatura pendiente en materia de legalidad y desarrollo económico.
“El contrabando es un delito aduanero vinculado con la comercialización de productos sin pagar los impuestos correspondientes (principalmente los aduaneros), incluyéndose las conductas de importación y exportación de mercancías”, refirió el Observatorio Nacional Ciudadano de Seguridad, Justicia y Legalidad.
Mientras que, los delitos en materia de derechos de autor, como la piratería, estarían vinculados con la reproducción, comercialización, distribución o uso no autorizado de obras protegidas por el derecho de autor, señaló la Experta CETYS.
Asimismo, mencionó que estas prácticas no solo afectan a la economía formal, sino que también se asocian a otros delitos como el lavado de dinero, la extorsión o los delitos cibernéticos, creando un entorno de ilegalidad que impacta múltiples sectores productivos: desde el entretenimiento hasta la industria farmacéutica, alimentaria y tecnológica.
Según el reporte Mapping Global Trade in Fakes 2025, elaborado por la OCDE y la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), el comercio mundial de productos falsificados alcanzó un valor estimado de 467 mil millones de dólares, equivalente al 2.3% del comercio global.
En este contexto, la Mtra. Canizales resaltó que México figura entre los 10 países de origen más relevantes de productos falsificados, de acuerdo con el mismo estudio. Aunque no es un productor dominante, su ubicación geográfica estratégica y su infraestructura comercial lo colocan como un actor clave en la red global de falsificación.
El Special 301 Report 2025 de la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) señala, además, que México permanece en la Lista de Observación Prioritaria, debido a la ausencia de investigaciones y procesos penales recientes en materia de falsificaciones y piratería, así como la falta de reglamentos que actualicen la legislación vigente tras el T-MEC.
Para la coordinadora, este panorama exige acciones integrales y coordinadas entre autoridades, titulares de derechos y sociedad civil: “México cuenta con un marco regulatorio para combatir el contrabando y la piratería, pero hay una brecha importante en su aplicación. Particularmente, se requiere del rediseño de una política pública integral en materia de propiedad intelectual que aborde el problema desde tres dimensiones: jurídica, económica y social.”
Finalmente, subrayó que la participación ciudadana juega un papel esencial. “Cuando el consumidor opta por la compra de artículos originales, se convierte en un aliado del ecosistema comercial pues apoya la economía formal, incentiva la innovación y ayuda en la promoción de una cultura de la legalidad y esto es, sin duda, lo que nuestro país necesita”, concluyó.