El semestre pasado tuve la satisfacción de emprender y cumplir con un viaje que jamás olvidaré. Recuerdo perfectamente los preparativos, mi estancia en esa ciudad, así como el día de mi regreso. El tener la oportunidad de vivir en otro lugar, el trato de la gente y la nostalgia de estar lejos, entre otras cosas, me provocó emociones encontradas.El intercambio me abrió las puertas a un mundo diferente; viajé y conocí muchos lugares que parecían irreales por la diversidad de gente y los paisajes tan hermosos. Fue entonces que entendí lo que explican en las reuniones de información previas al viaje. Esta experiencia no sólo es un cambio de aulas sino de costumbres, alimentos y personas.El haber podido realizar un intercambio, trajo muchas cosas buenas para mi formación como ser humano, aprendí a ser una persona independiente y a no limitarme a vivir algo que crees no serás capaz de ejecutar.*Extracto de testimonio.
¡Conocí un Mundo Diferente!

