¿Por qué irme de intercambio?, fue una de las primeras preguntas que pasaron por mi cabeza cuando recibí un folleto con la convocatoria. Para ese entonces yo estaba en 5to. semestre, la mitad de mi carrera, por lo que pensaba que irme de intercambio significaría atrasarme. Pensé en quedarme y seguir como siempre, esperando terminar la carrera y después viajar; sin embargo, no dejaba de tener la inquietud de vivir la experiencia que CETYS me ofrecía. Al final, decidí hacer los trámites, especulando que si quedaba era por algo, y así fue como pasó. De las tres opciones que escogí, en primer lugar puse Barcelona, pensando que de no ser en ese lugar no tendría caso ir. Para mi buena suerte califiqué para esa Universidad, y fue cuando me convencí de dar el paso. Ahora sé que a cualquier ciudad que te vayas, sea la primera, segunda o la última opción, siempre vale la pena. La experiencia del intercambio es algo que no lo puedes vivir en cualquier viaje, el ir a estudiar a otro país, es un concepto totalmente diferente e inolvidable. El llegar a un salón en donde no conoces a nadie y que con el paso del tiempo se conviertan en amistades significativas, es algo que no se puede explicar a menos que lo vivas. Además, creces como persona, aprendes a valorar las cosas que antes te parecía muy fácil tenerlas, aprendes a administrarte, organizarte y a tratar de acoplarte a la forma de vida a la que están acostumbrados en el lugar donde estés. Para mí eso fue de las cosas más difíciles pero no insuperables. Por todas estas razones ahora sé que si hubiera desaprovechado esta oportunidad, nunca podría haber vivido uno de las más bellas experiencias que puedes obtener al estudiar en CETYS.
El Intercambio fue la Mejor Decisión
