El hecho de irse de intercambio es una oportunidad que no se puede rechazar pues te ayuda a crecer como persona en todos los aspectos. Antes de irme tenía cierta duda, pues sabía que habría muchos retos al llegar ahí y que yo misma tendría que salir adelante sin la ayuda de nadie, sin embargo, después de un tiempo tome la decisión y acepte el reto.Pude hacer amistad con personas de diferentes nacionalidades como: franceses, canadienses, belgas, ingleses, brasileños, peruanos, holandeses, finlandeses y hasta otros mexicanos. Gracias a esto aprendí un poco de cada una de sus culturas, costumbres e idiomas y me di cuenta de que todos tenemos los mismos intereses sin importar el lugar del mundo en el que estemos.Además me enfrente a un sistema educativo muy diferente al que estaba acostumbrada, pues aunque me considero académicamente preparada, se me dificultó al principio. La escuela a la que fui era francófona, por lo cual esto me fue de gran ayuda para practicar y mejorar el francés, así como, aprender mucho más acerca de este idioma.Finalmente, quisiera agradecer a Programas Internacionales y a CETYS Universidad por tener convenio con la escuela a la que me fui, a mi mamá que siempre me apoyo y a toda la gente que creyó en mí.*Extracto de testimonio.
¡Una Oportunidad de Vida!
