En México, alrededor del 20 % de los jóvenes de 15 a 29 años se encuentran en situación NEET —Not in Employment, Education or Training—, es decir, ni estudian ni trabajan. Este fenómeno, conocido popularmente como “ninis”, genera preocupación social debido a sus implicaciones en la autonomía, el proyecto de vida y el bienestar familiar de los jóvenes.
La Mtra. Myrna Martínez García, Coordinadora de Psicología Infantil en CETYS Tijuana, explica que el término “nini” muchas veces está cargado de estigmas: “No se trata de flojera o desinterés; la mayoría de estos jóvenes enfrenta barreras estructurales, sociales y económicas que limitan sus oportunidades. Es importante que las familias y la sociedad comprendan las causas y ofrezcan acompañamiento en lugar de culpabilidad”.
Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), dos de cada tres jóvenes NEET a nivel global son mujeres, reflejando barreras de género como cuidados, embarazo adolescente y normas culturales. En América Latina, casi 1 de cada 5 jóvenes se encuentra en esta situación, lo que evidencia la necesidad de políticas públicas y estrategias educativas para su inclusión.
La Mtra. Martínez señala que los efectos del fenómeno se reflejan tanto en los jóvenes como en sus familias: “En los jóvenes, puede generar ansiedad, depresión y dificultad para proyectar su futuro. En las familias, aumenta el desgaste emocional y los conflictos en el hogar. Sin embargo, con orientación, límites claros y experiencias formativas, es posible reconducir la trayectoria de los jóvenes hacia la autonomía y la responsabilidad”.

Mtra. Myrna Martínez García, Coordinadora de la Lic. en Psicología Clínica CETYS Universidad Campus Tijuana.
¿Qué ocasiona en la familia?
- Papás y mamás emocionalmente agotados, resentidos, a veces divididos (“tú lo alcahueteas”, “tú eres demasiado duro”).
- Hermanos que perciben injusticia (“a él le permiten todo, a mí no”) y que pueden replicar el patrón o volverse hiperresponsables.
- Una casa que se vuelve campo de batalla en vez de espacio de acompañamiento.
¿Qué hacer si mi hijo YA es “nini”?
- Conversación honesta y sin sermones
- Poner límites y acuerdos claros
- Buscar apoyo profesional y redes:
3.1 Evaluación psicológica/psiquiátrica si hay señales de:
3.2 Depresión, ansiedad intensa, consumo problemático de sustancias, ideación suicida.
3.3 Orientación vocacional y talleres de habilidades para el trabajo (CV, entrevistas, habilidades blandas).
3.4 Conectar con programas públicos o sociales de juventud (becas, capacitación, empleo joven).
La Mtra. Myrna Martinez, recomienda realizar acciones preventivas desde la infancia, fomentando responsabilidades graduales y tolerancia a la frustración; así como acompañamiento en la adolescencia y transición a la adultez mediante orientación vocacional, programas de becas, capacitación y desarrollo de habilidades laborales.




