En pleno siglo 21, donde se toma en cuenta todo detalle en busca del bienestar humano, la actividad física y la salud mental juegan un papel muy importante para ese objetivo. Creer que un tema vale más que el otro es un error.
En redes sociales de internet, es común hallar a personas que comparten sus rutinas con los aparatos de gimnasio para el acondicionamiento físico, rematando con una selfie frente al espejo para mostrar sus avances. Pudiera ser vanidad en ciertos casos, pero también es ejemplo de autoestima y motivación en otros.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la actividad física tiene importantes beneficios para la salud del corazón, el cuerpo y la mente, reduciendo los síntomas de depresión, ansiedad y graves enfermedades.
“El ejercicio mejora y estimula la producción de neurotransmisores que se enfocan en la parte de la sensación de bienestar. De alguna manera, eleva la autoestima de las personas. Hacer regularmente ejercicio ofrece efectos positivos en aspectos, como una buena circulación sanguínea, estética corporal y una mejor calidad de vida. Hay que ver el ejercicio como un complemento diario, como alimento para cuerpo y alma. La medicina preventiva más económica que pueda existir”, dijo el Mtro. Juan Romero Villalobos, preparador físico de equipos representativos de CETYS Universidad e instructor de fortalecimiento físico para adultos mayores.
Todas las mañanas en los campus de CETYS Universidad, decenas de estudiantes de preparatoria salen de sus aulas para dirigirse al gimnasio o estadio, atendiendo la clase de educación física. Como lo hiciese cualquier atleta de alto rendimiento, cada alumno realiza estiramiento, acondicionamiento, trote y juegos recreativos.
La Mtra. Inés Verónica Macías, docente de educación física y asistente del equipo representativo de Básquetbol Femenil en la institución, explica el propósito de activar a los preparatorianos, aunque no sean necesariamente atletas.
“El objetivo principal de una clase de educación física es poner en movimiento a los alumnos, enseñarles que la actividad no solo es deporte, también las cotidianas. La clase está enfocada a los alumnos que no son deportistas de alto rendimiento y la razón es simple: son alumnos sedentarios que hacen poca actividad durante el día. Es nuestro deber como maestros de esta materia dejar el conocimiento necesario, para que una vez que no sea por obligación como en clase, el alumno pueda elegir seguir haciendo alguna actividad física para mantenerse sano, así como practicar algún deporte de manera recreativa”.
Y el otro lado de la moneda: el sedentarismo. ¿Cuánto afecta al estado de ánimo la falta de ejercicio en la vida diaria? Horas sentado en el asiento del vehículo, frente a un dispositivo, frente a la pantalla plana, etc. No sólo se trata de entumecimiento, músculos en exagerado reposo o la alerta de enfermedades cardiovasculares. También está lo que consumen el cerebro y el estómago durante esas horas de ocio.
La Dra. Edna Mireya Salazar Robles, docente de tiempo completo del Colegio de Ciencias Sociales y Humanidades en CETYS Universidad Campus Tijuana, compartió lo siguiente:
“Son muchos los aspectos que están relacionados, donde el sedentarismo se puede llegar a considerar un enemigo de la salud mental, pero no es determinante. Se entiende que la actividad física favorece al bienestar integral del ser humano, debido a las sustancias químicas que se liberan cuando se realiza. Apoya a disminuir el estrés, la ansiedad, mejora el estado de ánimo, aspectos que contribuyen a la salud mental. El sedentarismo es un comportamiento que implica poco movimiento y energía, esto puede llegar a desencadenar afecciones importantes sobre la salud en general, como es el caso de un deterioro en la salud mental”.
El filósofo griego Pitágoras dijo que el alma que se cura a sí misma, puede curar a otras. Es importante recordar que nadie llegará a salvar la vida de otra persona en materia de salud mental. Al principio y al final de cada biografía, está siempre la voluntad de su protagonista para superar sus propios objetivos.
Una rutina diaria de ejercicios es un primer paso para inspirar a sí mismo y a los demás.